miércoles, 10 de octubre de 2012

La Importancia De La Identidad Propia De La Sumisa

¿QUÉ ES LA IDENTIDAD PROPIA? En la forma que yo lo uso, "identidad propia " es un sinónimo de autoestima, de valoración , de confianza en una misma, de una personalidad bien definida, es decir, estas y otras cualidades que ayudan a que una mujer sea capaz de mantenerse por si misma. Naturalmente, para mucha gente el hecho de ser sumisa significa que no se está en la posición de tomar decisiones. Sin embargo, la identidad propia es muy importante a la hora de que una sumisa se forje su personalidad. ¿PORQUE ES LA IDENTIDAD PROPIA TAN IMPORTANTE? Tu Amo no va a estar siempre ahí Es maravilloso poder decir: "mi Amo me protege". Pero no siempre es así en la realidad. Puede pillarle el bus. O dejarte por otra. Esto ocurre. He visto a tantas mujeres, que después de años de matrimonio se encuentran solas defendiéndose ante la vida. Y la crisis de identidad en tales casos no es pequeña. Prevee los malentendidos y otros abusos de confianza Asegúrate de que hay una conversación honesta por ambas partes antes de que se caiga la primera pieza de ropa ya que así te evitarás errores y malentendidos. Los Amos son humanos y como tal, cometen errores. Al saber tus límites y necesidades no habrá abuso de confianza. Definir claramente los límites (incluso si son probados) te ofrece una forma de crear un vínculo de confianza. Si ves que el entiende y respeta tus límites, la confianza será mayor. Y si definís claramente los términos de la relación, se incrementará aún más dicha confianza. ¿COMO PUEDE CONSERVAR UNA SUMISA SU IDENTIDAD PROPIA Y SER SUMISA AL MISMO TIEMPO? Habla antes de que algo ocurra No habléis solo de los límites sino también lo que implican dichos límites. No necesitas ser minuciosa con respecto a lo que va a suceder durante el juego sino discutir los parámetros de los tipos de interacción ( por ejemplo, temas de seguridad y miedos con respecto a ciertos tipo de juego). Un comentario que oigo muy a menudo es : "no sé qué preguntar "Empieza a hablar, así saldrán las preguntas. Empieza con preguntas fáciles , por ejemplo, referidas al sexo oral, todo el mundo tiene su opinión y sus preferencias . Si te sientes bloqueada, di : ¿Hay algo que deba preguntar? (presta atención a su respuesta). Una razón por la cual debes hablar largamente sobre estos temas es que a los Amos sin escrúpulos o ineptos les aleja si no les interesas realmente. Es duro pero existen estos casos. Y yo les digo a las sumisas que vean a sus nuevos Amos como un coche de segunda mano, que no se dejan deslumbrar por el encanto exterior. Si no se ha discutido antes, no lo hagas durante el juego Una vez que el juego ha comenzado, las sumisas suelen verse envueltas en un estado de excitación y emoción . Pero si el Amo saca un cuchillo y nunca te había comentado que ocurriría, haz que lo suelte. Hazlo incluso con cosas tan inocuas como dildos . Asegúrate de que no ha sido usado por otra persona y que ha sido esterilizado convenientemente (ácido clorhídrico). Un Amo jamás debe aprovecharse de una sumisa mientras está jugando. Hacerlo es un signo de debilidad. Probar los límites es una cosa y aprovecharse de ellos para sorprender desagradablemente es otra cosa. Y muy cobarde, por cierto. Esto también se aplica a los collares: la decisión de ponerse un collar es muy seria y debe hacerse mientras las dos partes están en pleno control de sus facultades. He oído historias de sumisas a las que un Amo les ofrece su collar sin saber ellas antes qué es lo que conlleva. Sucede así: después de jugar con una sumisa y de que ellas haya tenido un orgasmo o tres, el "supuesto" Amo pregunta: ¿Quién es tu Amo? ¿Quién te quiere a ti? Y, ¿qué se supone que tiene que contestar la sumisa? "Para ser sincera, me estoy viendo con algunos chicos, pero por favor, continúa con lo que estabas haciendo...". Que ocurrirá si ella dice: "Usted, mi Amo". Entonces el Amo cogerá el collar y dirá : "Lleva esto como símbolo de tu sumisión hacia mí ". Una vez que ella ya lleva el collar, el le dice lo que espera de ella. Esto es totalmente nefasto. Si te pasa algo así, rechaza el collar , siempre puedes aceptarlo más tarde. Con esto no quiero decir que todos los Amos sean iguales. Pero, ¡he oído esta historia ya tantas veces!. Y , si te pasó a ti y estás contenta con los resultados, bendita tú, yo creo que esta práctica es muy cuestionable. Exige sinceridad. Plena confianza Esto es aún más duro que las propias negociaciones. Parece que es un desafío a la autoridad del Amo. Pero la sumisión no es algo automático. Es una opción activa por parte de la sumisa cada vez que se la una orden. Por lo tanto, si una sumisa se da, debe exigir que su Amo sea totalmente sincero con ella. La cruel realidad es que hay Amos que flirtean con varias sumisas al mismo tiempo sin saberlo ellas. Incluso hasta el punto de ponerle a una el collar y flirtear con varias a sus espaldas. Algunos Amos han prohibido a sus sumisas entrar al Irc para que no se enterasen de su promiscuidad. Por ello es importante informar a tu compañero de todas tus actividades . Al menos así, tiene la información suficiente para aceptarte o no. Ser sincera es algo más que no decir mentiras. La omisión también es una mentira. Si un Amo no respeta tus limites, huye!!! Si no los respeta ahora, no va a hacerlo después. No entres en el juego de " Si me quisieras, lo harías" . La respuesta que tu debes dar es : "Si tu me quieres, debes ser honesto y franco conmigo ". Un Amo seguro de sí mismo no debe tener problemas para respetar y entender tus límites. Y una vez que se han hecho estas negociaciones, tienes un montón de tiempo para demostrarle tu sumisión hacia Él. De lo que estoy hablando es de un sentido de propiedad. Todo está en su sitio y está hecho a su hora. Requiere paciencia, resolución y determinación. A la larga, llevará a unas experiencias más enriquecedoras por ambas partes.

lunes, 1 de octubre de 2012

Entrenamiento en la sumision

Los hábitos y conductas se desarrollan durante todo el tiempo entre las relaciones físicas; por eso los Amos/as elaboran rápidamente un detalle de consentimientos en cuanto a costumbres y procederes de la sumisa/o. Especificándole o haciéndole ver por qué y para qué lo hace, puesto qué está manifiesto que es para el placer de ambos. Una sumisa/a que alcanza destreza en sus hábitos y costumbres exalta la sensualidad a través de su cuerpo, comportamientos, gestos, comunicación, palabras y miradas al relacionarse con los otros. Pero debe estar atenta y no convertir esas dulces palabras de entrega y sumisión hacia su Amo/a, en palabras vacías de intención y emocion. Qué dominante no ha experimentado en toda su intensidad el placer cuando la sumisa/o repite "Soy suya, mí Amo/a o mí Señor/a" El comportamiento y el lenguaje de la sumisa/o no puede aislarse de sus sentimientos y exaltaciones. Una sumisa/o ofrece las mismas sensaciones de bienestar y placer cuando se relaciona con otros, incluso fuera del ámbito del BDSM. Trata de utilizar un tono y cadencia de voz agradables, modulado, suave, intencional; sus movimientos gestuales y corporales seran finos, delicados, sutiles; su mirada clara e incitante; una sonrisa dulce y permanente. Se debe mostrar sencilla y dispuesta a complacer, evitar originar situaciones de rechazo; controlar su estado anímico mostrando equilibrio. Debe valorar el roce corporal como muestra de declarar amistad; ha de saber escuchar más que hablar... Cuidado, no quiere decir que debe ser temerosa, insulsa, ajena a su propia personalidad o carente de ella, por el contrario, debe poseer un comportamiento respetuoso, aunque tenga que oponerse a ideas, conceptos, decisiones o comportamientos que no son de su condición, educación o parecer. Un comportamiento que busca inquirir, investigar, explorar, desde el más absoluto respeto, con la única intención de ganarse bienestar, amistad y complicidad en una comunicación abierta y de confianza, es propio de una sumisa/o bien educada. Es posible porque conoce, ejercita, desarrolla y controla cada una de las cualidades inherentes a su personalidad, las positivas y las que debe aún mejorar; conoce y escucha a su cuerpo, consciente de su comportamiento, brindándole seguridad, la misma que le permite la entrega a su Dominante. La sumisa que realiza con destreza y normalidad este comportamiento, genera admiración y elogios prolongados de su Amo/a y extraños, reportándole a él más que a nadie, un profundo placer y unos altos grados de sensualidad y disposición a seguir recibiendo y a continuar ordenando en el entrenamiento hacia la sumisión. El Amo/a debe hacer una parte muy importante para que la sumisa/o pueda lograr lo que se está enseñando. No se encuentran hábitos y conductas como los descritos si esos comportamientos no los posee el Amo/a. Si para una sesión debe existir alta compenetración en los roles, en la convivencia y en la complicidad, así también debe haberla en los hábitos y conductas que tienen con otras personas, debe quedar manifiesta esa simbiosis, esa coordinación, esa construcción de comportamiento armónico, equilibrado y acompasado. A veces un gesto o una palabra serena expresa una orden, -casi imperceptible- y es suficiente para que la sumisa entienda y obedezca. Hábitos son los que haceres cotidianos, actividades que la sumisa/o hace como muestra y señal de sumisión hacia su Amo/o; un e-mail, una forma de saludar, una llamada, una manera de vestir, etc. Estos hábitos son autorizados, han sido consensuados con el Amo/a que aprueba que se hagan. Dentro de los hábitos y costumbres deseadas por el Amo/a, éste puede introducir a la sumisa/o en nuevas dinámicas que estimulan y desarrollan las formas de sumisión mental y corporal. Son las que la sumisa/o debe hacer porque es del gusto, agrado y placer del Amo/a y en beneficio de la sumisa/o: realizar ejercicios físicos; controles de salud; interés por otras maneras de capitalizar más productivamente el ocio y afines a las costumbres y hábitos de su Amo/a. Desarrollar el interés por determinadas expresiones culturales, música, lectura, teatro, retomar estudios, etc., y desarrollar un sentido distinto de la posesión de las cosas hace al crecimiento individual y de la D/s.. Una sumisa/o conocedora de su poder, se entrega a esa entrega tantas veces como le ordene su Amo/a, sin esperar una respuesta inmediata, porque sabe que será satisfecha en la misma proporción y aún más extraordinariamente a como ella se entregó; y la magia de la D/s volverá a comenzar de manera sin fin su ciclo. En los hábitos prohibidos están incluidos aquellos que el Amo/a introduce con la finalidad de romper barreras, impedimentos, prejuicios, tabúes, de carácter psicológico o moral que una sumisa/o puede poseer por pautas culturales, sociales o religiosas. Pueden ser cosas muy simples, como tomar sol con sus senos descubiertos o la utilización de palabras soeces o mal sonantes, de la dependencia al tabaquismo y/o beber alcohol en exceso en presencia de su Amo/a, etc. Hay maneras en la D/s, -siempre consensuadas- que implican exhibicionismo y emputecimiento de la sumisa/o. ¿Qué tiene que ver el exhibicionismo y el emputecimiento con los hábitos y conductas antes descritas, acaso pretenden transformar a la sumisa/o en el tipo de mujer/hombre afirmativa/o, que se señaló anteriormente? Una disciplina puntual o continuada de exhibicionismo y/o de emputecimiento en el BDSM se realiza porque Amo/a y sumisa/o así lo desean, o al menos, el Amo/a así lo detectó en ella/él. Tiene sentido para la ruptura de tabúes y limitaciones del Amo/a y de la sumisa/o: en la desposesión que adquiere la sumisa/o de su propio cuerpo; como forma de expresión sexual, buscando más el placer ajeno que el propio; en el aprendizaje de técnicas y desarrollo de otras formas de ejercer la sumisión. Si se logra el convencimiento de que cada cuerpo tiene una forma diferente de exhibirse, moverse, estimularse, sentir y actuar sexualmente, -ni mejor ni peor- simplemente distinta; y cuanto antes el Amo/a y la sumisa/o queden convencidos y satisfechos con esa forma diferente de ser, más goce van a obtener sistemáticamente. En el BDSM una forma muy acertada, -si ambos así lo fantasean y desean- es mediante el intercambio o sesiones conjuntas con otros Amos/as y sumisas/os , en un ambiente seguro, sano y consensuado